Fecha 24 del torneo Clausura y Central Córdoba viajó hasta General Rodríguez para visitar a Leandro N. Alem. Dos equipos de similar campaña en el Clausura, antes de comenzar el partido el local tenía un punto menos que el Charrúa y ahora lo supera por dos. Si tomamos esa foto, si nos detenemos en esa realidad sin tener en cuenta el contexto, podríamos decir que entonces no era de extrañar una derrota del equipo rosarino, pero hubo un acontecimiento que le da un toque dramático a esta nuevo desengaño. El equipo de Alem se encontró con un grave problema con motivos de estarse jugando una copa llamada Potrero, auspiciada por el Kun Agüero, que no se entiende bien que es pero que se ha provisto de la participación de muchos jugadores del ascenso y en el caso de Alem 6 integrantes de su planilla fueron a disputar un partido entre semana por dicha copa, ni bien advertida la dirigencia del club decidió la recisión de los 6 contratos por lo tanto a su enfrentamiento con Central Córdoba el equipo se presentó completamente diezmado.
Parecía entonces la ocasión perfecta para que el CC sumara de a 3 y asegurara su posición en la tabla para consolidar su participación en la próxima Copa Argentina y quedar a la espera de la demorada decisión de AFA de aumentar los ascensos y explicar de qué forma se decidirían los mismos. Por su parte el elenco rosarino afrontaba la inesperada baja de Killer por un estado febril, la dupla Teglia Acoglanis decidió el ingreso de Ramírez por el Gran Capitán, pero también hizo un cambio táctico en mi opinión incomprensible, la salida de quién venía siendo una verdadera revelación en el medio campo por sus excelentes actuaciones, Julián Jerkovic, para que ingrese Gonzalo Gómez y formar un doble 5 con Simón Sierra. El experimento fracasó estrepitosamente.
Los muchachos de General Rodríguez ganaron siempre en el medio, el futbol Charrúa no fluyó nunca, los delanteros no fueron abastecidos y la presencia de dos veteranos en las lides del ascenso adelante, Maldonado y Schmidt, complicaron a toda la defensa rosarina ya que estos viejitos piolas son muy bichos jugando al fútbol y no te perdonan una lo que obliga a estar muy concentrados a todos los defensores. Así se fueron sucediendo una tras otra situaciones de peligro que convirtieron al arquero Colombo en la figura de Central Córdoba. En el final del primer tiempo que terminó 0 a 0 quedó la sensación que el local había hecho los merecimientos necesarios para irse a los vestuarios ganando por lo menos por un gol.
Se inicia el segundo tiempo y todo sigue igual, pero a los 5 minutos se vivió en emotivo momento en el estadio ante la salida de Ezequiel Vicente, muy aplaudido por el público local y saludado efusivamente por todos los jugadores de Alem, es que éste caudillo a sus 40 años se despidió frente a su público que tanto lo quiere de la práctica profesional del futbol.
Con el correr de los minutos en el medio campo rosarino la confusión era enorme, tomaba la pelota Madero, levantaba la cabeza para buscar con quién jugar, pero Atardo no está, Mustachi no está, Marín no está, Flores no está, Jerkovic no está y el longilíneo mediocampista debía recurrir a la individual para tratar de conectar con los delanteros. Por supuesto todo esto fue advertido por ese zorro del conourbano que es Retamar y le ajustó las marcas de tal manera que en casi todas las jugadas perdía la pelota o lo obligaba a ensayar pases largos desde posiciones muy incómodas. Mientras tanto Colombo seguía revolcándose salvando el arco en ocasiones de forma milagrosa.
A los 19 minutos tiro libre favorable al CC, había que aprovechar porque al parecer la pelota parada era la única manera de llegar al área rival. Pero el centro queda corto, rechaza de cabeza el 6 Floris le cae al 10 Di Landro que abre hacia su derecha al pique de Maldonado quien cruza un pase para la entrada de Tonet, toda la defensa rosarina mal parada y el carrilero define el mano a mano contra Colombo poniendo el 1 a 0, se veía venir, lo que no se vio venir es que del saque en media cancha la juegan para atrás a la posición de Bogino que se enreda con la pelota, se la quita Maldonado y lo dicho, no perdona, define con sabiduría ante la desesperada salida del arquero para poner el 2-0 y una vez más a Central Córdoba le hacen 2 goles en un minuto y se termina el partido. Si cuando precalentaba Jerkovic uno llegó a pensar que teniendo compañía Madero era posible la remontada, minga, porque el que salió fue el propio Madero y ni cerca de descontar estuvo el CC.
Con ésta derrota y el triunfo de J.J.Urquiza, Central Córdoba quedó fuera de los clasificados para la Copa Argentina y en la última fecha para obtener ese privilegio deberá ganar y que no lo haga J.J, porque de quedar empatados en puntaje ellos nos llevan gran ventaja en la diferencia de gol. En cuanto a poder participar de algún reducido ante la posibilidad que se amplíen los ascensos, la pregunta es ¿Para qué? Porque jugando así sólo sumaremos más frustración. |